Todos los cristianos somos conscientes del gran amor que Dios tiene por nosotros y de cómo alegra nuestros corazones cada día.
Es tan importante el amor en el cristianismo que en numerosas ocasiones decimos que Dios es amor. Hoy en este artículo veremos las referencias de la Biblia Católica al amor de Dios, con una gran lista fascinantes versículos.
El amor de Dios en el cristianismo
En la historia de la humanidad han existido muchas religiones con sus diferentes dioses y algunas de ellas aún persisten hoy en día. En casi todas, las figuras divinas eran crueles y peligrosas para el pueblo cuando se enfadaban, creando desastres enormes según la mitología.
En el cristianismo y otras religiones contemporáneas, Dios es amor y como tal es bondadoso con su pueblo. El Señor ama a su creación y es por esto que ha dedicado tantas acciones y esfuerzos hacia nosotros, como lo fue enviar a su hijo Jesús.
El amor de Dios trasciende al sentimiento de amor humano y requiere entrega, perdón, sacrificio y dedicación. Como hemos dicho, la máxima expresión de este amor fue la entrega de Jesús a la humanidad quien, a cambio de su vida, cargó con todos nuestros pecados y nos dio unas pautas esenciales para vivir una vida consiente, llena de bondad y amor hacia el prójimo.
Dada la importancia del amor de Dios en nuestras vidas cristianas, en Tu Biblia Online hemos pensado que sería genial dedicar un artículo a los versículos del amor de Dios que aparecen en la Biblia Católica. ¡Estamos seguros de que te van a gustar!
Además, los separaremos según si pertenecen al Antiguo Testamento o al Nuevo Testamento para que puedas ver las diferencias entre la interpretación del amor de Dios según las épocas.
Versículos del amor de Dios en vídeo
Antes de empezar con el listado de versículos, te dejamos un bonito vídeo con algunos de los versículos que encontrarás en el artículo. Disfruta de estas bellas y tranquilizantes imágenes y siente el amor de Dios dentro de ti.
Versículos sobre el amor de Dios en el Antiguo Testamento
Aunque las creencias de las personas que vivieron en la época en la que se escribió el Antiguo Testamento tuvieron algunas influencias de religiones anteriores en las que el amor de Dios no era un tema tan importante, encontramos muchas referencias en todos sus libros a este gran amor. ¡Vamos a verlas!
Por la mañana hazme saber de tu gran amor, porque en ti he puesto mi confianza. Señálame el camino que debo seguir, porque a ti elevo mi alma. (Salmo 143:8)
Las personas necesitamos que nos guíen en el camino de la vida y nos dejaremos guiar por quien nos quiere y nos ama.
Que nunca te abandonen el amor y la verdad: llévalos siempre alrededor de tu cuello y escríbelos en el libro de tu corazón. Contarás con el favor de Dios y tendrás buena fama entre la gente. (Proverbios 3:3-4)
El amor y la verdad son unos de los valores más importantes del cristianismo y debemos llevarlos siempre con nosotros aplicándolos en el mundo.
¿Puede una madre olvidar a su niño de pecho, y dejar de amar al hijo que ha dado a luz? Aun cuando ella lo olvidara, ¡yo no te olvidaré! Grabada te llevo en las palmas de mis manos; tus muros siempre los tengo presentes. (Isaías 49:15-16)
El Señor ama a su creación como una madre a su hijo recién nacido. Nunca nos abandonará y debemos recordarlo.
A cambio de ti entregaré hombres; ¡a cambio de tu vida entregaré pueblos! Porque te amo y eres ante mis ojos precioso y digno de honra. (Isaías 43:4)
El amor de Dios es sinónimo de entrega y sacrifico, siendo un amor superior a cualquier sentimiento humano.
Grábame como un sello sobre tu corazón; llévame como una marca sobre tu brazo. Fuerte es el amor, como la muerte, y tenaz la pasión, como el sepulcro. Como llama divina es el fuego ardiente del amor. (Cantares 8:6)
No hay ningún sentimiento parecido al amor de Nuestro Señor, es más intenso que cualquier cosa que podamos imaginar.
El que va tras la justicia y el amor halla vida, prosperidad y honra. (Proverbios 21:21)
Seguir el camino de Dios trae felicidad y un buen futuro.
El odio es motivo de disensiones, pero el amor cubre todas las faltas. (Proverbios 10:12)
El odio y el amor pueden parecer palabras contrapuestas, pero lo cierto es que el amor es muy superior al odio.
A continuación, te dejamos algunos versículos más sin comentario, ya que su mensaje es muy parecido a los anteriores.
El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad! (Lamentaciones 3:22-23)
Yo amo al Señor porque él escucha mi voz suplicante. Por cuanto él inclina a mí su oído, lo invocaré toda mi vida. (Salmo 116:1-2)
Porque sólo un instante dura su enojo, pero toda una vida su bondad. Si por la noche hay llanto, por la mañana habrá gritos de alegría. (Salmo 30:5)
Esta es la oración al Dios de mi vida: que de día el Señor mande su amor, y de noche su canto me acompañe. (Salmo 42:8)
No alimentes odios secretos contra tu hermano, sino reprende con franqueza a tu prójimo para que no sufras las consecuencias de su pecado. No seas vengativo con tu prójimo, ni le guardes rencor. Ama a tu prójimo como a ti mismo. Yo soy el Señor. (Levítico 19:17-18)
Versículos de el amor de Dios en el Nuevo Testamento
Con la llegada de Jesucristo al mundo, la imagen de Dios cambió radicalmente en los fieles y el amor se volvió uno de los pilares de nuestra religión.
Las acciones que hacen los cristianos deben ser siempre por amor y siguiendo los pasos de Jesús. Esto se refleja en los evangelios y los otros libros del Nuevo Testamento como veremos a continuación.
El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. (1 Corintios 13:4-5)
El amor verdadero es un sentimiento puro que no va ligado a ninguna otra emoción o valor. Si no es así, deja de ser amor para convertirse en interés o envidia.
Hagan todo con amor. (1 Corintios 16:14)
Esta simple sentencia refleja a la perfección la moral y ética de los cristianos. Debemos amar en todos los actos de nuestras vidas.
Por encima de todo, vístanse de amor, que es el vínculo perfecto. (Colosenses 3:14)
Como ya hemos dicho anteriormente, el amor de Dios es superior a cualquier sentimiento o experiencia humana.
Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. (1 Juan 4:16)
El amor nos acerca más al Señor así que es importante amar y actuar con amor cada día.
Siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor. (Efesios 4:2)
Igual como Dios nos ama a nosotros aunque muchas veces no lo merezcamos, debemos amar a las personas de este mundo y sobre todo tolerarlas siempre.
Nosotros amamos a Dios porque él nos amó primero. (1 Juan 4:19)
Tenemos amor en la humanidad gracias a que el Señor nos enseñó a amar. Sin Él el mundo sería gris.
El amor debe ser sincero. Aborrezcan el mal; aférrense al bien. (Romanos 12:9)
No hay nada más puro que el amor y es el camino que debemos tomar ante cualquier decisión.
Hasta aquí llegamos con los versículos comentados, pero te dejamos una maravillosa lista de versículos del amor de Dios a continuación. ¡Te recomendamos leerlos!
Más versículos sobre el amor de Dios
Ahora, pues, permanecen estas tres virtudes: la fe, la esperanza y el amor. Pero la más excelente de ellas es el amor. (1 Corintios 13:13)
Sobre todo, ámense los unos a los otros profundamente, porque el amor cubre multitud de pecados. (1 Pedro 4:8)
Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor. (Efesios 3:16-17)
Si tengo el don de profecía y entiendo todos los misterios y poseo todo conocimiento, y si tengo una fe que logra trasladar montañas, pero me falta el amor, no soy nada. (1 Corintios 13:2)
Y éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado. (Juan 15:12)
En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que fuera ofrecido como sacrificio por el perdón de nuestros pecados. (1 Juan 4:10)
Ámense los unos a los otros con amor fraternal, respetándose y honrándose mutuamente. (Romanos 12:10)
Que el Señor los lleve a amar como Dios ama, y a perseverar como Cristo perseveró. (2 Tesalonicenses 3:5)
Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra. (Efesios 5:25-26)
Nadie ha visto jamás a Dios, pero si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece entre nosotros, y entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente. (1 Juan 4:12)
Si alguien afirma: «Yo amo a Dios», pero odia a su hermano, es un mentiroso; pues el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios, a quien no ha visto. (1 Juan 4:20)
Nadie tiene amor más grande que el dar la vida por sus amigos. (Juan 15:13)
Sin embargo, como está escrito: «Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente humana ha concebido lo que Dios ha preparado para quienes lo aman.» (1 Corintios 2:9)
Sino que el amor perfecto echa fuera el temor. El que teme espera el castigo, así que no ha sido perfeccionado en el amor. (1 Juan 4:18)
No tengan deudas pendientes con nadie, a no ser la de amarse unos a otros. De hecho, quien ama al prójimo ha cumplido la ley. (Romanos 13:8)
¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente porque no lo conoció a él. (1 Juan 3:1)
Que el Señor los haga crecer para que se amen más y más unos a otros, y a todos, tal como nosotros los amamos a ustedes. (1 Tesalonicenses 3:12)
Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. (Marcos 12:30)
El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor. (1 Juan 4:8)
El amor no perjudica al prójimo. Así que el amor es el cumplimiento de la ley. (Romanos 13:10)
¿Quién nos apartará del amor de Cristo? ¿La tribulación, o la angustia, la persecución, el hambre, la indigencia, el peligro, o la violencia? (Romanos 8:35)
Con este artículo hemos querido dar a conocer la gran cantidad de referencias al amor de Dios de la Biblia Católica, para destacar la importancia de esta palabra en nuestro día a día como cristianos.
Antes de irnos, queremos dejarte un vídeo muy especial. Se trata de una reflexión muy profunda acerca del amor de Dios y el sacrificio que hizo el Señor, entregándonos a Jesús quien murió por nosotros en la cruz. Esperamos que te guste mucho y que te lleve a un bonito rato de reflexión.
Ahora sí que nos despedimos dándote las gracias por leer este artículo.
El amor de Dios nos une a todos para que nos amemos como hijos suyos. ¡Hasta el siguiente artículo!